No sé si las personas que leen estas líneas se habrán enterado pero dicen que hay crisis. En los periódicos dicen que es económica pero no les creo. Porque la situación de un país no sólo se mide por la situación de la Bolsa o por su PIB. Eso ha demostrado la crisis que, desde hace más de 7 años, no nos deja respirar. Muchos, buscando su propio interés, se han llenado la boca con esa maldita palabra. Crisis. Pero no, parece que no han entendido aún que ésta va más allá de números e indicadores. La crisis es social y cultural, es estructural y no se soluciona con mejores resultados económicos, si no con reflexiones profundas sobre qué estamos haciendo.
Algunos empresarios han aprovechado este mal momento para demostrar lo carroña que podemos llegar a ser los humanos. Los aprovechados suelen aparecer en los momentos de mayor flaqueza y esta crisis no ha sido menos. De esta forma, la situación económica ha servido para que algunas empresas se lucren de la desesperación de las personas que andan buscando un empleo. Y, como no podía ser de otra forma, esta precariedad laboral se ha multiplicado en una profesión tan inestable como es el periodismo.
Hubo un tiempo que las tardes de Cuatro estaban habitadas por un programa de humor que pretendía seguir la estela de 'Noche Hache' (con el que compartían equipo) con el que analizar la actualidad política, social y cultural desde un punto de vista gamberro. Quizás mucho no se acuerden (sus audiencias no brillaron en de las dos temporadas que se mantuvo en antena y fue trasladado sin éxito a la noche del jueves) pero, sin saberlo, 'Estas no son las noticias' se convirtió en una de las canteras más prolíficas de la actualidad.
Dani Rovira, Ana Morgade, Dani Martínez, Anna Simón, Tania Llasera, David Broncano, o Marta Nebot eran algunos de los colaboradores del espacio que producía Globomedia y que presentaba Quequé. El programa, estrenado en 2008, supuso el salto a la pequeña pantalla de varios de ellos y la consagración de otros, pese a que algunos (como Javier Coronas o el propio Quequé) ya poseían una sólida carrera a sus espaldas.
Aunque ya había aparecido en 'Fenómenos' o 'A3Bandas', el espacio de Cuatro impulsó de manera definitiva la popularidad de Dani Martínez. El leonés era el encargado de secciones como "A corazón abierto" o "Bricozapping", en las que repasaba la actualidad televisiva a través de sus célebres imitaciones. Y, aunque sólo apareció en una temporada, sus colaboraciones le sirvieron para que, dos años más tarde, la cadena volviera a confiar en él para conducir 'Tonterías las justas'. Pero el espacio no sólo fichó a Dani Martínez de 'Estas no son las noticias', ya que también hizo lo propio con Anna Simón. La catalana, que anteriormente había conducido un call tv, destacó como reportera y su buen hacer le abrió las puertas de 'Tu sí que vales', 'Otra movida' o 'Tu cara me suena'.
Pero si hay alguien que ha causado furor en España en los últimos años, ese es Dani Rovira. El actor ya había destacado en Paramount Comedy gracias a sus monólogos y al concurso 'Smonka!' pero esta fue su primera incursión en la televisión nacional y aunque sólo duró 3 meses, fue la primera piedra en un camino que le ha llevado a triunfar en teatro, cine y televisión.
Humor, emoción, música en directo y momentos para el recuerdo son los cuatro elementos que deben predominar el todo programa de entretenimiento que se precie. Una mezcla que consiga que el espectador ría, disfrute y logre mantener en la memoria algunos momentos con el paso de los años. Lo consiguió 'Sorpresa, sorpresa' y también lo logró 'El gran juego de la oca' pero, desde entonces, ningún programa de entretenimiento había a atrapado al espectador como 'Tu cara me suena'.
El programa que presenta Manel Fuentes ha ido mejorando con el paso de los años, como el buen vino. El formato era una joya que se ha ido puliendo poco a poco, gracias al cuidado con el que Gestmusic y Antena 3 lo han tratado. Después del traspiés que sufrió en su tercera temporada, la cadena consideró que no debía quemar el programa y decidió dejarlo reposar durante unos meses. Absoluto acierto. En este tiempo, el equipo ha acometido algunos cambios relevantes, como la mecánica o el plató.
La nueva forma de votar, contando con la opinión del público, ha revitalizado el espíritu de 'Tu cara me suena'. Y el nuevo plató ha sido una grata sorpresa, ya que ha ampliado las posibilidades escenográficas del programa, algo muy importante. Además, la selección del casting ha sido un revulsivo, ya que se ha conseguido un grupo muy compacto con perfiles muy variados pero complementarios.
Pero, el gran acierto de la nueva temporada de 'Tu cara me suena' es... 'Tu cara me suena'. El programa ha logrado mantener su esencia de espacio familiar pero con puntos gamberros necesarios para sacar una sonrisa al espectador. Y no se ha olvidado de tocar el corazón de los televidentes pero tampoco de hacer reír, convirtiéndose en un carrusel de emociones que deja una sensación en el espectador de querer más.
TCMS ha conseguido devolver a la televisión una cosa muy importante: la ilusión. Y los responsables de todo esto es todo el equipo, desde el primero hasta el último. Porque el programa no sería lo mismo sin la realización, el cuerpo de baile, la escenografía, los profesores.. Ha logrado conseguir un equipo compacto y muy bien equilibrado cuyo resultado se puede ver en pantalla. ¡Larga vida a 'Tu cara me suena'!
No hay duda: Belén Cuesta es una de las intérpretes más cotizadas del panorama actual, tanto en TV como cine. La revista Fotogramas ha desvelado que será la protagonista de la adaptación televisiva de la película "Perdiendo el norte", una de las apuestas más fuertes de Antena 3. La comedia, que funcionó como un tiro en los cines, también contará con otro actor en estado de gracia últimamente: el gran Manuel Burque ("Requisitos para ser una persona normal"). Pero, ¿por qué Belén Cuesta está en todos lados? ¿Qué ha hecho una chica como ella para merecer todo esto?
Lo único que ha hecho ha sido trabajar duro. Y ser natural, una cualidad excepcionalmente extraña que no abunda en la actualidad. Con esas dos características, la andaluza se está consagrando como una sólida actriz. Ah, bueno, y falta el tercer ingrediente para esta receta. Belén Cuesta tiene arte y eso no se entrena. O se tiene o no se tiene. Y a ella le desborda. Se nota que es una actriz curtida en teatro, con carácter y recursos. Lo demostró en 'En el aire' donde, rodeada de gente que sabe mucho de hacer reír, como Berto o Buenafuente, no desentonó y le dio al programa un toque fresco.
No es casualidad que tenga por estrenar 4 de las películas españolas más esperadas ("Ocho apellidos catalanes", "El pregón", "Kiki, el amor se hace" y "Tenemos que hablar"). Tampoco es culpa del azar que su mínimo papel en los primeros capítulos de 'Vis a vis' fuera muy aplaudido y la gente reclamara más. Ni que "La llamada", la obra de teatro con la que lleva girando desde 2013, sea una de las mejores valoradas por público y crítica en los últimos años. Tampoco lo es que su último trabajo, 'Paquita Salas', se haya convertido en una de las sorpresas de la temporada. No, es esfuerzo, trabajo y saber aprovechar las oportunidades que van llegando.
Belén es uno de esos ejemplos en los que merece la pena fijarse. Constancia, buen hacer y talento son las claves que han convertido a esta malagueña en una de las actrices más valoradas del panorama actual. Y otro aspecto tan importante como las demás: aprovechar las oportunidades. Cada plano, cada frase o cada gesto, ha sabido llevárselos a su terreno para hacerlos únicos y así no pasar inadvertida. En definitiva, Belén Cuesta es una de las mejores cosas que le han pasado a la TV nacional en los últimos tiempos (y que dure).
Es uno de los elementos más temidos de los últimos tiempos. Odiado por políticos y empresarios, es una herramienta capaz de destrozar carreras y desmoronar grandes discursos. La hemeroteca ha causado grandes estragos últimamente pero nos ha dejado uno de los espacios televisivos más bonitos de los últimos tiempos. Este domingo, La 2 estrena la cuarta temporada de uno de sus programas más aclamados: 'Cachitos de hierro y cromo'.
El espacio que presenta Virginia Díaz se ha consolidado en la parrilla, a través de conjugar varios ingredientes que dan como resultado un programa muy redondo. El primero de ellos es la nostalgia, que fluye sin convertirse en algo excesivamente lacrimógeno. Todo lo contrario. 'Cachitos...' despierta la ternura de quién recuerda el pasado con una mezcla entre ilusión y añoranza. Viendo algunos estilismos, letras de las canciones o puestas en escena, las sonrisas y el "¿cómo nos podíamos poner esas cosas?" son inevitables. Y esa es otra de sus claves: la radiografía de España a través de sus programas musicales. Gracias a las actuaciones, se pueden observar las diferentes épocas por las que ha pasado este país de forma sorprendentemente clara. También es un gran acierto el hecho de que cada programa tenga una temática definida para que no parezca un cajón de sastre en el que se emiten actuaciones sin criterio organizativo.
Entre sus puntos fuertes, es necesario destacar la interacción que ofrece el programa a su público. Además de típico hashtag, 'Cachitos de hierro y cromo' va más allá y ofrece la posibilidad de que los propios espectadores sean los que rotulen los vídeos, con premios a los más originales incluidos. Esto hace que los televidentes se sientan parte del programa y lo entiendan como algo suyo, lo cuál repercute en el boca-oreja, hecho fundamental para entender el progresivo éxito que ha ido alcanzando el programa en un día tan difícil como el domingo (con competencia tan dura como 'Salvados', 'GH' o 'La película de la semana').
Y, por supuesto, otro de los ingredientes de esta receta es la necesidad que tiene la televisión de programas musicales. La música es una constante en nuestras vidas y son muchas las personas que echan de menos programas como 'Plastic', 'Tocata' o Música sí'. Incluso los que no vivimos estos espacios los añoramos a través de 'Cachitos...', donde vemos una TV que arriesgaba, era creativa y no estaba encorsetada.
Todo ello aliñado con un maravilloso rastreo del inmenso archivo de TVE da como resultado este programa, que también nos explica de dónde venimos musicalmente hablando. Pero, en mi opinión, la gran enseñanza que nos deja este espacio es que la música ha sido, es y será siempre una parte fundamental de nuestra vida, algo esencial. Y, además, tiene una acertada crítica escondida a Televisión Española: 'Cachitos...' es posible gracias a los programas musicales que ha habido durante décadas en la televisión pública pero, ¿cómo haremos un espacio así en un par de décadas si ahora no hay programas de música? Pero, sobre todo, no recuerda que no siempre cualquier tiempo pasado fue mejor pero que recordarlo siempre es sinónimo de pasar un buen rato.
Este viernes se producirá uno de los eventos más esperados de la temporada televisiva ya que se estrena la cuarta temporada de 'Tu cara me suena'. La nueva edición del programa llega rodeada de una gran expectación, tanto por su potente casting (destacan nombres como Falete, Ana Morgade o Ruth Lorenzo) como por su día de emisión (mucha gente duda que pueda hacer frente a 'Sálvame Deluxe'). Creación española, el espacio que presenta Manel Fuentes ha sido exportado a decenas de países (Albania, Arabia Saudí, China, Indonesia, México, Polonia o Turquía, entre otros) donde arrasa en audiencias. Para calentar el inicio de la nueva edición, vamos a darnos una vuelta por algunas de las mejores actuaciones del resto de países.
Portugal: Luciana Abreu cantando 'If I were a boy' (Beyonce)
El país vecino también se ha contagiado del éxito del programa. En Portugal, el espacio ha contado con 3 ediciones más una "mini" y ha triunfado en audiencias (48'1%, 47%, 37'2% y 32'1% de cuota de pantalla en las respectivas temporadas). Esta adaptación ha contado con grandes actuaciones pero ninguna como ésta de Luciana Abreu, presentadora y actriz lusa, en la que se transforma en Beyonce y que le sirvió para alzarse ganadora de la segunda edición.
El programa que produce Gestmusic también ha conquistado Asia. TCMS desembarcó en marzo de 2015 y ha sido tal su éxito que este mismo otoño se emitirá su segunda temporada. Nyoy Volante logró quedar subcampeón pero, viendo actuaciones como ésta, extraña que no venciese. El cantante se transformó en uno de los ídolos juveniles actuales y no defraudó.
Rusia: Alexander Rybak calcando 'Rise like a phoenix' (Conchita Wurst)
El ganador de Eurovisión 2009 fue uno de los participantes de la tercera temporada de la adaptación rusa de 'Tu cara me suena' y no lo hizo nada mal. Aunque no consiguió alzarse con la victoria (fue subcampeón), dejó para el recuerdo interpretaciones tan maravillosas como este 'Rise like a phoenix' caracterizado de Conchita Wurst (todo un desafío en un país como Rusia).
Otro lugar donde el programa goza de gran éxito es Italia, que está a punto de estrenar la quinta temporada del show. En la cuarta edición, Valerio Scanu, un joven cantautor del país transalpino, venció en la tercera gala con una magistral interpretación de este gran tema de Stevie Wonder. Finalmente, logró el subcampeonato de la cuarta edición.
Argentina: Diana Amarilla interpretando Isabel Pantoja ('Marinero de luces')
Volvemos a cambiar de continente y en esta ocasión nos desplazamos hasta América del Sur, donde el programa se ha adaptado en muchos países. Uno de ellos es argentina, donde se han desarrollado tres temporadas del programa (esta en emisión actualmente). Allí se han atrevido con cantantes españoles como Isabel Pantoja, con la que Diana Amarilla consiguió la victoria en la cuarta gala de la segunda temporada tras una espectacular actuación.
También destacó Laura Esquivel, que ganó la primera edición con esta imitación de Cyndi Lauper y actualmente concursa en la tercera temporada del programa.
Seguimos en Latinoamérica pero nos trasladamos a Chile donde, si bien la adaptación del programa no obtuvo demasiado éxito, sí dejó actuaciones para el recuerdo. Entre ellas, esta grandiosa interpretación del humorista Claudio Reyes que se atrevió con el mítico 'Pavo real' (canción que Josema Yuste también interpretó en la primera temporada de la versión española).
Brasil: Vanessa Jackson interpretando 'I will always love you' (Whitney Houston)
Quedó segunda en la primera gala con esta brutal imitación pero esto es lo que se puede llamar empezar con buen pie. Hay veces que sobran las palabras así que pasen, vean y disfruten.
Grecia: Giannis Savvidakis cantando 'You can leave your hat on' (Joe Cocker)
El país heleno también ha tenido dos temporadas de 'Tu cara me suena', donde ha habido todo tipo de actuaciones. Sin duda, una de las mejores fue la imitación que el cantante griego Giannis Savvidakis realizó interpretando una de las canciones más conocidas del genio Joe Cocker (que también fue imitado con gran éxito en España por Florentino Fernández). Viendo la actuación, es entendible que, además de ganar esta gala, se alzaracon la victoria de la segunda edición.
Estados Unidos: Jon Lovitz interpretando 'Bennie and the Jets' (Elton John)
Para finalizar con este repaso, vamos con una actuación que no fue la mejor de su edición pero que es grandiosa. En la edición estadounidense del programa participó Jon Lovitz, un conocido humorista (sus participaciones en los Roast o en 'Saturday Night Live' son memorables), que hizo las delicias del público. Como muestra, esta imitación de Elton John, que no tiene desperdicio.
Siempre, desde muy pequeño, tuve claro que quería ser periodista. Vocación, dicen. Mi madre, resignada (siempre quiso que fuera cocinero o vulcanólogo), lo acabó aceptando. Pero un día hace no mucho, a mis 20 años, descubrí que no, que el periodismo estaba bien pero que en esta vida lo mejor que se podía ser era ignorante. Pero no un ignorante cualquiera, no, yo quiero ser un ilustre ignorante.
Poco a poco, sin levantar excesivo ruido, este loco programa se ha ido erigiendo como el buque insignia de Canal+ (perdón, de Movistar+). Estrenado el 28 de noviembre de 2009, 'Ilustres ignorantes' se ha consolidado como uno de los referentes del humor catódico patrio. Probablemente, el directivo que dio el visto bueno a semejante locura nunca podría imaginar que ese extraño programa ganaría un Premio Ondas en 2014 o que sería reconocido como uno de los mejores espacios televisivos actuales. Porque, ¿quién se podía imaginar que juntar a tres balas perdidas con un par de amigos para hablar de cosas absurdas podría funcionar en la TV actual? Aunque claro, no son tres balas perdidas cualquiera. Javier Coronas, Pepe Colubi y Javier Cansado son tres profesionales con años de experiencia y más tablas que IKEA.
La mecánica del programa es sencilla y esa es una de sus principales virtudes, dado que no se pierde en complicaciones. Presentación del tema del que se va a hablar a través de una escena de una película o serie y al lío. Otro punto a favor es que el concepto escogido es simple y conocido por todos, por lo que la gente se puede sentir identificada cuando se habla de él. Coronas, el capitán, reparte el juego y comienza el desmadre. Cansado abre fuego con sus teorías históricas que encandilan al público y, después, es el turno de los famosos invitados.
Ellos son uno de los elementos fundamentales del espacio, ya que deben de tener arte y salero para tirarse a la piscina y seguir con el juego. Algunos de los que mejor juego han dado fueron Ángel Martín, Jorge Garbajosa, Marta Fernández, Raúl Cimas, Pepín Tre o Pablo Puyol, que en una de las últimas entregas se reía de su paso por 'UPA Dance'. Porque, al fin y al cabo, son como niños traviesos que sólo buscan pasar el rato con sus ocurrencias. Y, por último, llega el gran Colubi, con su cabeza repleta de sexo, traumas y salvajes ocurrencias que suelta sin filtro. Un acierto contraponer la (supuesta) seriedad de Cansado junto a la brutalidad de Colubi, aliñado por la rapidez de reflejos de un siempre brillante Coronas.
Ahí estriba uno de los éxitos de 'Ilustres ignorantes': el cuidado descontrol. Aunque el programa tenga una escaleta muy marcada, carece de corsés ni ataduras y cada cuál es libre de tirar por donde vea y que salga el sol por Antequera. En una época donde la corrección política rige nuestras vidas, que cinco personas se reúnan para hablar de temas cotidianos sin cortapisas es como encontrar un oasis en el desierto. Porque, además, practican todo tipo de humor: rápido, negro, verde, blanco.. Ninguno se les resiste porque son seres inteligentes (aunque nos quieran hacer creer que no) y saben como meterlo para que no desentone. Ni astronauta ni médico ni bombero, cuando tenga un hijo, yo quiero que sea ignorante, ilustre ignorante.
Te puede no gustar 'El hormiguero', puedes aborrecer a Pablo Motos, odiar a Marron pero hay una cosa imposible: que no te gusten Trancas y Barrancas. Las hormigas más famosas y longevas de toda la televisión están de celebración, ya que cumplen una década y lo hacen en plena forma. A lo largo de estos diez años, se han ido consolidando como uno de los elementos más icónicos de la televisión actual, ganándose al público con sus divertidos comentarios y su total ausencia de pelos (en este caso, pelotillas) en la lengua. Pese a que se han recorrido media Europa y ningún famoso se les ha resistido, estas hormigas (que en un principio iban a ser serpientes o calcetines) cada día demuestran que les queda cuerda para rato.
Trancas y Barrancas, que son fabricadas a mano y se cambian cada dos años según cuenta David Sanz en El Mundo, son las estrellas más aclamadas tanto por el público como por los invitados que pasan por el programa. Incluso cuentan con primos por medio mundo, como los brasileños Fisgas y Bisnaga o los mexicanos Pichas y Cachas. Han vendido más de un millón de productos con su nombre en todos estos años pero, ¿por qué un éxito tan abrumador de unos muñecos de felpa en un programa no infantil?
La respuesta es sencilla: porque todos querríamos ser esos muñecos de felpa. Trancas y Barrancas son bestias, deslenguadas, traviesas y no se cortan, dicen lo primero que se les pasa por la cabeza. ¿A quién se le ocurre que una hormiga de trapo le diga a una actriz que quiere pasar la noche con ella? ¿O que otra le diga al presentador del programa todos sus defectos físicos? De algún modo, son una representación de lo que los demás querríamos decir pero no podemos. Y por eso triunfan, porque no se cortan pero tampoco saturan, saben a la perfección aportar ese punto de gamberrismo necesario para romper la dinámica del programa.
No hay que olvidar que (en parte) son responsables de la fama de El Hombre de Negro ya que, con sus frases sobre el colaborador, éste fue ganando responsabilidad en el programa. Además, han creado coletillas que han traspasado la pantalla, como el mítico "fracaso absoluto" que gritan cada vez que algún experimento sale mal. Así, se han ido consolidando en el imaginario colectivo, convirtiéndose en parte de la cultura popular.
Pero el gran mérito del éxito de estas locas hormigas moradas lo tienen Juan y Damián, los hombres detrás de la felpa. Son rápidos de mente, divertidos y siempre acertados, algo muy difícil de conseguir en un programa tan rápido (a veces demasiado) y efervescente como es 'El hormiguero'. Aún así, ellos son los reyes del caos y desde su agujero lo tienen todo controlado. Antes de empezar el programa, únicamente cuentan con la escaleta del programa y sólo tienen preparada la prueba que le van a hacer al invitado. Lo demás, cosecha propia. Y ojalá esa cosecha dure muchos años más. Larga vida a Trancas y Barrancas.
Empezaré haciendo una confesión muy íntima: no veo 'Gran Hermano'. No me atrae (casi ningún reality lo hace) y no he seguido ninguna edición, con excepción de la anterior (por motivos laborales). Por supuesto que conozco a personajes como Fresita o Jorge Berrocal pero nunca me ha interesado este formato, al revés que a buena parte de los españoles. Porque aunque reciba miles de críticas (fundamentadas o no), tiene una legión de fieles que consiguen una cosa inusual: pese al posible desgaste, el estreno de cada edición congrega a más gente delante de la pantalla que la anterior. Sin ir más lejos, la primera gala de 'Gran Hermano 16' logró el mejor share de un estreno de GH desde la undécima temporada del reality,
Pero este desinterés no me impide comprender los puntos fuertes del programa, que son muchos. El primero de ellos, el más visible, es Mercedes Milá, que ha marcado de forma definitiva y absoluta espacio. Además, el equipo de redactores sabe jugar muy bien con las tramas y pruebas, potenciando conflictos, amores, desamores y, en definitiva, carnaza para que los telespectadores no puedan quitar el ojo de la pantalla. Por supuesto, el acierto de los responsables de casting es fundamental para que dichas historias puedan fluir y surgir.
Pero, si hubiera que destacar una sola razón de la buena marcha de este espacio, esa sería su capaz para hacer que sus espectadores comenten lo que ocurre y generen interminables debates. Sin ir más lejos, el hashtag #GHDirecto (con el que se comenta todo lo que pasa en Guadalix) ha ocupado los primeros puestos de la lista de los temas más comentados en Twitter desde el estreno del programa. Porque el espacio ha sabido aprovechar muy bien las nuevas tecnologías y los televidentes, que antes comentaban el programa en casa o con amigos, se lanzan a la plaza pública virtual para seguir con avidez todo lo que pasa.
Además, la emisión del 24 horas por Mitele y la creación de apps que permiten interactuar de una manera más directa es un aliciente para que todos los fans del reality puedan estar enganchados al programa de una forma que ningún otro consigue. Y esa es su mayor virtud: la fidelidad de los espectadores, que viven las tramas de forma pasional, con sus filias y fobias. De hecho, más que un programa de entretenimiento parece una telenovela, con giros de 180º en las tramas y secretos que van saliendo a la luz. Esto último es una de las grandes apuestas de esta temporada: los secretos. Un acierto porque, desde el primer minuto, las redes han comenzado a especular sobre ellos y haciendo crecer la intriga (y, por tanto, la expectación). Minipunto para el equipo de Zeppelin que, de saber llevar este tema, se puede convertir en una de las claves del programa.
Pero este punto fuerte no es nuevo porque, en las primeras ediciones, 'Gran Hermano' se sustentó en el boca-oreja. De la noche a la mañana, todo el mundo corrió a verlo, entre la curiosidad de la novedad y el miedo a quedarse marginado en las conversaciones. Probablemente, esa fue una de las principales bazas que convirtieron al experimento sociológico que anunciaba Mercedes Milá hace una década y media en un fenómeno de masas. Pero no sólo GH se beneficia de esta generación continua de noticias. Otros programas de la casa, como 'Sálvame' o 'El programa de AR', se sirven de lo que ocurre en Guadalix para llenar horas y horas y atraer al público del reality a sus propios programas. Y, además, el espacio le ofrece a Telecinco la posibilidad de ocupar multitud de minutos en diversas franjas con una simple conexión a la casa. Contenido gratis que reporta buenas audiencias. Una maniobra perfecta, vamos. Porque, guste o no el programa en sí, lo que hay que reconocer es que está construido al milímetro para que todo funcione. Y funciona.
Ya es oficial. Después de unos meses de necesario barbecho, en San Sebastián de los Reyes han tomado una de las decisiones más esperadas de este inicio de temporada. El viernes 18 de octubre es el día escogido para el estreno de la cuarta temporada de 'Tu cara me suena'. La cadena de Atresmedia se había reservado uno de sus formatos estrella para que así se recuperase del desgaste sufrido en su versión "mini".
Así, Antena 3 había preparado muchas novedades (nuevo plató, diferente sistema de votación, cambios en el jurado) y un casting muy potente que muchos han nombrado como el mejor de todos los que ha habido. Por ello, ha sorprendido que hayan decidido estrenar la nueva temporada en viernes, un día más que arriesgado. Analicemos lo que supone esta medida:
Riesgos
-El viernes tiene un claro dominador: 'Sálvame Deluxe'. El programa que comanda Jorge Javier Vázquez es un clásico de los viernes y se ha llevado a muchos programas por delante ('Increíbles', 'Los viernes al show', 'Atrapa un millón'). Su fiel audiencia constituye un segmento difícil de erosionar, por lo que el talent de Antena 3 tiene una ardua tarea para reclutar a todos sus seguidores de las anteriores ediciones.
-Anunciar su estreno el día que comienza 'Gran Hermano', Fallo de Antena 3, que ha optado por descubrir uno de sus grandes misterios a la misma hora que Guadalix de la Sierra a acoger a sus primeros habitantes. Esto le ha podido restar impacto mediático ya que, en otro momento, hubiera sido mucho más comentado. Una apuesta como ésta necesita de toda la publicidad posible y anunciarlo el día que se estrenaba 'GH' le ha restado muchísimo protagonismo.
-Los viernes y el público joven. Uno de los targets más fieles a 'Tu cara me suena' ha sido el joven. A la mañana siguiente a su emisión, era Trending Topic en institutos y universidades. El problema es que los viernes, la gente joven suele salir y no está pendiente de lo que ponen en la tele. ¿Será capaz TCMS de vaciar las discotecas? ¿O es que lo de que la gente joven sale los viernes es un mito?
-Si la apuesta sale mal, pierdes uno de sus principales activos. Antena 3 ha jugado fuerte, ya que ha apostado todo por el programa que produce Gestmusic. Si se estrella en audiencias, el canal de San Sebastián de los Reyes perdería su programa más exitoso en los últimos años y que ha sido adaptado en multitud de países con gran éxito. Esto supondría una pérdida vital en su rama de entretenimiento, en el que sólo destaca 'Top Chef'.
Ventajas
-Oferta única. Antena 3 ha apostado por programar TCMS el viernes. Sólo hay que repasar la parrilla para observar que no hay un formato parecido, lo que ha podido ser decisivo para que la cadena decidiera que era el mejor día para un formato así. Además, la mayoría de espacios emitidos los viernes son películas, que no tienen un público fijo y carecen de fidelidad.
-Si la apuesta sale bien y ganan al 'Deluxe', es un acontecimiento épico. Pongámonos en el caso de que la jugada llega a buen puerto y desbancan al programa de Telecinco durante varias semanas consecutivas. Sería una de las noticias televisivas del año, puesto que el espacio rosa es uno de los más sólidos actualmente. Mucha gente piensa que es un error poner a competir a dos formatos tan fuertes pero quizás sea la única manera de hacer daño a 'Sálvame Deluxe'.
-Ya no será necesario poner Spotify mientras estás de copas en casa. Ya no habrá peleas por poner música durante las fiestas caseras. Eso si, como toque una gala con canciones lentas, puedes pasar una noche más aburrida que Ylenia leyendo a Ortega y Gasset.
-Y podrás crear nuevos juegos de beber. El "yo nunca" o los juegos de cartas están bien pero, si quieres un fiesta extrema, tómate un chupito cada vez que Ángel Llácer bese a alguien. Al acabar, Pocholo a tu lado será Sor Lucía.
Pero todo esto son palabras. Lo importante llegará el viernes a partir de las 22:00, cuando comience la batalla. Muchas han sido las críticas a Antena 3 por "arruinar" el programa y más con la buena pinta que tiene esta edición pero si hay algo que nos ha enseñado la vida es que, para ganar, hay que arriesgar. Y, la verdad, los espectadores siempre pedimos que las cadenas tomen riesgos así que se agradece que las cadenas se la jueguen de vez en cuando. Suerte a todos y que la fuerza (y la audiencia) os acompañen.
Ana Pastor y todo su equipo han vuelto y lo han hecho en plena forma. 'El objetivo', uno de los buques insignia de laSexta, ha presentado sus cartas para la nueva temporada, cargada de acontecimientos políticos. Y no había mejor forma de volver que con una entrevista a una de las figuras con mayor relevancia en la actualidad: el todavía President de la Generalitat, Artur Mas.
El líder de Convergencia se sentó ante la periodista para someterse a un esperado cara a cara que no defraudó. Sin duda, Pastor es una profesional que levanta pasiones y odios por igual y con multitud de defectos (sorprendentemente, es humana) pero, si hay una cosa irreprochable en ella, es su actitud y su tenacidad en las entrevistas. En esta ocasión, Mas recurrió a la vieja estrategia de irse por las ramas y repetir el mismo discurso una y otra vez para no contestar a las preguntas concretas de la presentadora. Ana Pastor preguntó, repreguntó e intentó huir del bucle en el que quería instalarse el líder político, demostrando su absoluta validez al frente de un programa de este tipo.
Artur Mas, un excelente orador, flaqueó en varias ocasiones ante las preguntas y dio síntomas de discurso gastado que necesita una vuelta de tuerca. Además, recibió varios KO, como el caso de las donaciones a CDC. Por su parte, Ana Pastor también tuvo fallos ya que, en algunas ocasiones, no pudo reconducir al President dentro de sus argumentos en bucle que no respondían la pregunta. Por ello, incidió excesivamente en el tema escaños/votos, haciendo un tanto pesada esta parte.
Además, el programa también contó con entrevistas a Iñaki Gabilondo y Mónica Terribas. Las conversaciones con ambos intentó arrojar algo de luz a la situación actual en Cataluña. Es encomiable la intención de explicar algo tan complejo para los que no vivimos allí desde varios puntos de vista. Aunque parezca obvio que el periodismo debe ofrecer varias perspectivas de un mismo hecho, en los tiempo que corren, en los que sólo se busca el sensacionalismo, el clic fácil y la simpleza, lo normal se convierte en extraordinario. Destacable especialmente el testimonio de Gabilondo, que realizó una acertada autocrítica en el que cuestionó el papel de la prensa en el proceso que se ha vivido en Cataluña. "Hemos tenido poca conciencia de lo que estaba pasando", explicaba el veterano comunicador.
En definitiva, 'El objetivo' volvió fuerte y reforzando sus puntos fuertes. La contextualización, las declaraciones de personajes de máxima relevancia y con un claro estilo didáctico que hace mucha falta en tiempos tan convulsos como los que se viven. Ana Pastor ha demostrado una vez más que es una gran entrevistadora y que el periodismo sin trincheras es posible (y necesario). Lo único que se echó de menos fueron secciones como 'El españolisto' o 'Se lo que hicisteis con el último contrato', que esperemos que regresen en las próximas entregas.
Las cocinas se volvieron a encender y los cuchillos se empezaron a afilar anoche. Esto es sinónimo de una nueva temporada de 'Top Chef', que volvió a los hogares españoles y lo hizo con un notable éxito de audiencia. El talent culinario agolpó a 2.311.000 espectadores, logrando un 15,9% de share. Fue líder de su franja por delante del estreno de 'Iron Man 3' y el nuevo programa de Bertín Osborne, 'En tu casa o en la mía'. Pese al liderazgo, hay que recordar que es peor primera gala del programa de Alberto Chicote en lo que número de espectadores se refiere, ya que el programa de estreno de su primera temporada lo vieron 3.030.000 televidentes y el de la segunda 2.372.000.
El regreso del espacio, producido por Boomerang, sorprendió gracias a Paco Roncero, la revelación de la noche. El tercer juez en discordia se estrenaba en 'Top Chef' y no defraudó, demostrando que era capaz de ser protagonista y no sólo comparsa de Chicote. Pero su aparición también tuvo parte negativa, ya que se le pudo ver forzando en exceso el papel de "poli malo". El mejor ejemplo es el momento en el que le pregunta a una de las aspirantes que en quién pensaba justo antes de decidir si entraba o no y ella, emocionada, respondía que en su madre. Acto después, Paco le decía que muy bien pero que no iba a tener cuchillos (al menos en esa ronda) y la concursante se volvió a su sitio acordándose de una madre, pero en esta ocasión la de Roncero.
En cuánto al casting, de primeras sólo llamó la atención Oriol, un desquiciado que se cree que ha inventado la penicilina. Su "freestyle cooking" (de la que no haré comentarios porque luego las demandas hay que pagarlas) fue una de las mejores cosas de la noche. El Tamara Falcó de los fogones pide protagonismo a gritos (y alguna que otra cosa más) y promete dejar grandes momentos para el recuerdo. Otro de los momentos estelares fue cuando Jesús, el cocinero barroco, dijo que había cocinado para Madonna, Julio Iglesias... y para Fernando DiCaprio. No sabemos si el tal Fernando es el primo de Leonardo o un chaval que vive en Burguillo de Osma pero esperamos que disfrutara de la comida.
Aunque es la primera gala, las anteriores ediciones se caracterizaron por establecer unos roles claros desde el principio y así la audiencia tomó partido desde el primer minuto (el villano Marc, el pedante Carlos, el tímido David..). Habrá que ver cómo evolucionan los participantes porque la identificación del público con alguno de los concursantes es una de las claves para que el numerito del share sea satisfactorio. Además, será muy importante la interacción de los jueces con los concursantes y entre ellos mismos. El hecho de que Chicote haya cedido protagonismo en el show es un aspecto realmente positivo porque, si bien Alberto es un animal televisivo todoterreno, su excesiva presencia puede saturar y con ello se perdería un gran comunicador.
Como en las anteriores ediciones, la fotografía, producción y decorados no cambian, un acierto ya que es uno de los puntos fuertes del programa. Hay mucha expectación sobre las novedades que tendrán lugar en esta tercera temporada (más famosos, más exteriores, cambio de país) pero el primer programa ha dejado un buen sabor de boca. El próximo martes, más y ¿mejor?
